

Hablamos de una trascripción para vibráfono de una obra que está escrita originalmente para violín, y que desde hace unos años, también se interpreta con marimba.
Tras haber trabajado con la «Fuga» de la misma sonata, me pareció muy interesante ampliar la oferta musical y educativa, creando una versión del presto y mostrar las posibilidades que el vibráfono tiene a la hora de poder interpretar obras escritas por Bach, que tan enriquecedoras son para todos los músicos en general, y para nosotros los percusionistas, en particular.
En el arreglo he cambiado la tonalidad buscando facilitar su discurso musical sobre las láminas del instrumento, pero ello no elimina ni un ápice de expresividad a la partitura. Es una obra en la que el virtuosismo se hace muy patente, lo que permite al percusionista lucirse y mostrar algunos de los recursos instrumentales más importantes de la técnica a cuatro baquetas.
La trascripción está dedicada a Ana Gayoso, alumna de percusión en Musikene, intrépida intérprete con ganas vivas de seguir aprendiendo y valiente colonizadora de la vieja y nueva música.