Tras unas semana de maduración, de reposo emocional y de reubicación de mi propia realidad, hoy me pongo manos a la obra y publico la memoria emocional de lo vivido el 21 de marzo de 2014 junto a Susana Rodríguez y sus alumnos del IES Vadinia de Cistierna, en León. Como siempre hago, junto a mi propia memoria, publicaré las memorias emocionales de los alumnos que participaron conmigo sobre el escenario. De esta forma podréis hacheros una idea de qué es lo que ocurrió allí.
Besos y mil gracias a todos!!!
antonio domingo
MEMORIA EMOCIONAL DE «CON EL CUERPO 2».
Hace casi un año conocí a Susana Rodríguez, profesora de música en el IES Vadinia de Cistierna, en León. La conocí en el curso de formación musical «Musitictac» organizado en el Centro de Formación de Profesores de Ciudad Rodrigo, en Salamanca. Ese curso, educativamente hablando, ha sido uno de los mejores que he ofrecido, pero no por mi, si no por la calidad de mis compañeros ponentes y por la entrega y el entusiasmo del grupo de profesores especialistas en música que se congregaron allí.
Tras unos meses de distancia, me avisan para otro curso de formación en el Centro de Formación de Profesores de León, donde coincidiría de nuevo con Susana como alumna. No recuerdo a quién fue al primero que se le ocurrió la locura de, aprovechando mi viaje a León, ofrecer algunos conciertos de difusión musical por la zona. La cuestión es, que en menos que canta un gallo, ya me habían organizado una mini gira de conciertos por León. El resultado fue espectacular, sólo con leer los cientos de tweets que recibí durante esa gira, es posible hacerse una idea del fantástico resultado de la misma. El uso de las redes sociales en el escenario fue algo nuevo que puse en marcha por primera vez en esa gira por León, algo que ya usaba de forma habitual en la sección Musikarte del programa de radio EL PASACALLES junto a María José Acevedo en Radio Castilla-La Mancha. Pero nunca lo había hecho en directo sobre un escenario. El resultado fue verdaderamente impresionante.
Pasadas tan solo dos semanas de ese evento, volví a llamar a Susana. Los dos sabíamos que había muchos más centros educativos que querían programar el espectáculo «CON EL CUERPO», debido a los resultados de la mini gira anterior. Le ofrecí la posibilidad de volver a León, evidentemente, pero con una vuelta de tuerca más: volver a su instituto, el IES Vadinia de Cistierna, pero esta vez con otro espectáculo en el que podía compartir escenario con sus alumnos. Crear un espectáculo entre alumnos de secundaria de su instituto y yo. Ésta gran educadora, que no tiene miedo a nada, se tiró directamente a la piscina y en menos de tres semanas teníamos de nuevo otra gira. Ésta de 5 conciertos por institutos de León.
Ni qué decir tiene que los resultados fueron tan buenos como los anteriores. Pocas veces me he sentido tan cómodo sobre el escenario como con los alumnos de secundaria leoneses. Una muy grata sorpresa y un verdadero placer en escena. Su entrega y su capacidad de atención hicieron muy sencillo mi trabajo sobre el escenario.
La gira se iniciaba en León capital, pasando posteriormente por Ponferrada para terminar en Cistierna con Susana y sus alumnos. Y lo que puede parecer una locura, eso de compartir espectáculo, camerino, escenario con alumnos de secundaria, se convirtió en uno de los momentos más gratificantes de mi carrera como pedagogo musical. Ya fui consciente de que aquello pintaba bien en los ensayos previos que tuvimos, por cierto, uno de ellos por SKIPE, ellos en León en el recreo del instituto y yo en casa en Toledo. Como decía, aquello desde el primer momento pintaba bien. Gente con ganas, gente entregada, gente con chispa en los ojos, gente con alma para entregar. ¿Quién dice que los jóvenes actuales son una generación perdida? Quien dice eso no conoce la profundidad del alma humana y hace mucho tiempo que cuando mira, no ve.
Éstos chavales, Patricia, Estefanía, Bea, Marta, Alba, Marcos, Álvaro y Cristian, me ofrecieron lo mejor de sí mismos. Todo aquello que poseían en su interior en ese momento. Fueron capaces de absorver el espectáculo al completo, memorizar los textos y aprenderse las coreografías sin problemas. E incluso, y esto para mí es lo más importante, fuero capaces de hacer suyo el espectáculo y crear nuevas estructuras dentro de él. Eso sólo ocurre cuando aquello que estamos haciendo forma parte ya de nuestro ADN, y estos siete chicos y chicas se fundieron con la idea de arte y cultura que yo les proponía. Algo absolutamente espectacular.
Pero la cosa no quedó ahí, si no que a esto hay que añadir que el día del concierto, incluso siendo una actividad de libre elección, la sala estaba totalmente llena de compañeros de estos chicos del propio instituto que pagaron su entrada para poder ver y disfrutar de nuestro trabajo. Si no lo veo, no lo creo.
Ante todo esto sólo puedo decir:
Gracias por permitirme acercarme de esa forma tan natural a vuestras vidas.
Gracias por creer en mis locuras y en las de Susana.
Gracias por demostrar al mundo que aun hoy lo sueños son posibles.
Gracias por romper los tópicos de los jóvenes.
Gracias por dejarme crecer a vuestro lado.
Gracias Susana, por creer en mi trabajo y dejarme jugar con tus alumnos.
Espero poder seguir escribiendo muchas memorias emocionales como esta. Eso significará que aun camino feliz por esta senda educativa que me permite dibujarme a mi mismo en cada paso.
Mil besos desde Toledo.